Ingredientes:
1 kg de mejillones frescos
2 cucharadas de aceite de oliva
1 cebolla picada finamente
2 dientes de ajo picados
1 pimiento rojo picado en cubitos
4 tomates maduros, pelados y picados
1 cucharadita de azúcar
Sal y pimienta al gusto
1/2 taza de vino blanco
Perejil fresco picado (para decorar)
Instrucciones:
Lava bien los mejillones bajo agua fría y retira las barbas que puedan tener. Descarta aquellos que estén rotos o abiertos y no se cierren al tocarlos.
En una olla grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Agrega la cebolla y el ajo picados y cocina hasta que estén dorados y fragantes.
Añade el pimiento rojo y los tomates picados a la olla. Cocina durante unos minutos hasta que los tomates se ablanden y se forme una salsa.
Agrega el azúcar, sal y pimienta al gusto. Revuelve bien la salsa y cocina por unos minutos más.
Vierte el vino blanco en la olla y deja que hierva durante unos minutos para que se evapore el alcohol.
Añade los mejillones a la olla y mezcla bien para que se cubran con la salsa de tomate. Tapa la olla y cocina a fuego medio-alto durante aproximadamente 5-7 minutos, o hasta que los mejillones se abran.
Una vez que los mejillones estén abiertos, retira la olla del fuego. Desecha cualquier mejillón que no se haya abierto durante la cocción.
Sirve los mejillones con la salsa de tomate en platos individuales. Espolvorea perejil fresco picado por encima para darle un toque de frescura.
¡Disfruta de tus deliciosos mejillones con tomate! Puedes acompañarlos con pan crujiente o pasta si lo deseas.
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